Matarromera Crianza no es sólo un vino, es casi un vino de culto. Su primera añada, la de 1994, fue elegida Mejor Vino del Mundo en un concurso internacional de la Organización Internacional del Vino de España (OIVE). Desde entonces, este 100% Tempranillo ha sido una de las señas de identidad de Matarromera.
Procede de viñedos muy próximos al río Duero que producen uvas de gran calidad. Están situados en los municipios de Olivares y Valbuena de Duero, en Valladolid, una de las zonas más idóneas para la elaboración de vino en España.
Presenta un color cardenal oscuro con abundantes tonos violáceos. Muy cubierto, limpio y brillante. Aromas con intensidad y complejidad, donde destacan potentes aromas a frutas negras muy maduras como moras, grosellas negras, cerezas y grosellas, en excelente armonía con notas especiadas provenientes de su crianza en madera limpia, con tostados, regaliz, café y vainilla.
Matarromera Crianza no es sólo un vino, es casi un vino de culto. Su primera añada, la de 1994, fue elegida Mejor Vino del Mundo en un concurso internacional de la Organización Internacional del Vino de España (OIVE). Desde entonces, este 100% Tempranillo ha sido una de las señas de identidad de Matarromera.
Procede de viñedos muy próximos al río Duero que producen uvas de gran calidad. Están situados en los municipios de Olivares y Valbuena de Duero, en Valladolid, una de las zonas más idóneas para la elaboración de vino en España.
Presenta un color cardenal oscuro con abundantes tonos violáceos. Muy cubierto, limpio y brillante. Aromas con intensidad y complejidad, donde destacan potentes aromas a frutas negras muy maduras como moras, grosellas negras, cerezas y grosellas, en excelente armonía con notas especiadas provenientes de su crianza en madera limpia, con tostados, regaliz, café y vainilla.