La mezcla predominantemente de Pinot Noir crea una fruta muy fina, refrescada por el Chardonnay que le confiere un final elegante y mineral. Embotellado a finales de la primavera siguiente a la cosecha, crianza mínima en bodega de 4 años. La dosis se ajusta con precisión para preservar el equilibrio entre frescura, fruta y vinosidad sin enmascarar el carácter y la pureza del vino.
Este champán es perfecto para disfrutar como aperitivo o acompañar una comida. Maridará muy bien con platos sencillos y también más elaborados: gougères y hojaldres de queso (para el aperitivo), o paté en croûte, pollo asado, aves en salsa cremosa, queso Comté o parmesano.
Arquitectura: Chardonnay 45%, Pinot Noir 45%, Meunier 10%
Con su elegante redondez y su frescura, este champán tiene un atractivo muy amplio. Su estructura sutil y elegante es la expresión típica de los vinos de Champagne Gosset.